Título español: Hôzuki, la librería de Mitsuko
Título original: Hôzuki
Libro: Autoconclusivo
Autora: Aki Zhimazaki
Editorial: Nordica Libros
Año publicación: 2017
ISBN: 9788416830732
Género: Novela contemporánea, literatura japonesa.
Nº de páginas: 128 págs.
Coste: 16.50 €
Mitsuko tiene una librería de lance especializada en obras filosóficas. Allí pasa los días serenamente con su madre y Tarô, su hijo sordomudo. Cada viernes por la noche, sin embargo, se convierte en camarera en un bar de alterne de alta gama. Este trabajo le permite asegurarse su independencia económica, y aprecia sus charlas con los intelectuales que frecuentan el establecimiento.
Un día, una mujer distinguida entra a la tienda acompañada por su hija pequeña. Los niños se sienten inmediatamente atraídos entre ellos. Ante la insistencia de la señora y por complacer a Tarô, a pesar de que normalmente evita hacer amistades, Mitsuko aceptará volver a verlos. Este encuentro podría poner en peligro el equilibrio de su familia.
Aki Shimazaki sondea aquí la naturaleza del amor maternal. Con gran sutileza, cuestiona la fibra y la fuerza de los lazos.
«Un libro de gran belleza, con tono ambiguo y sutil, que anima al lector a seguir pensando mucho después de cerrarlo. Elegante y cautivador».
Valérie Gans, Madame Figaro
Aki Shimazaki nació en Gifu (Japón) en 1954, pero vive en Montreal (Canadá) desde 1991. Sus libros han sido traducidos al inglés, japonés, serbio, alemán, ruso y húngaro. Con El quinteto de Nagasaki ganó el Premio Ringuet de la Academia de las Letras de Quebec, el Premio Literario Canadá-Japón y el Premio Gouverneur-Général en 2005. Tras un segundo ciclo de cinco novelas titulado Au coeur du Yamato, en 2015 comenzó un tercero, Azami. Es también autora de las novelas Tonbo (2012) y Hôzuki, la librería de Mitsuko (2016). Entre sus escritores de referencia están Marguerite Duras, Osamu Dazai y Agota Kristof. 
Hozuki, la librería especializada en libros de filosofía es regentada por Mitsuko, una madre soltera que vive una vida tranquila junto a su hijo sordomudo y su madre. Mitsuko es una mujer que, a pesar de sus pocos estudios, es muy culta gracias a las charlas que tiene con ilustres intelectuales que conoce cada semana en su segundo trabajo y hará lo que haga falta para sobrevivir y darle una buena vida a su hijo.
Hasta que un día, una mujer de clase alta entra en la librería junto a su hija y empieza a involucrarse poco a poco en su día a día destapando secretos inconfesables y un pasado tortuoso.
Si es verdad que este libro no tiene ese toque tan poético y filosófico en la escritura como otros libros que he leído de autores japoneses, al contrario, es una escritura sencilla, profunda, dulce y amena, muy cercana y que narra una historia perfecta para una tarde relajada y tranquila.
Mitsuko me encanta, es una mujer admirable, se ha enfrentado al mundo ella sola y ha conseguido tener una vida estable y decente donde cuida de su hijo Tarô, quien lo es todo para ella y hará lo que haga falta por protegerlo, él da luz a su vida y es su razón para seguir adelante. Aunque no es un mujer que tenga muchos amigos, solo se nos muestra a su hijo y a su madre, es una buena mujer que solo quiere vivir en paz con su familia.
Tarô, ese niño es la dulzura personificada, a pesar de su discapacidad, se nos muestra como un niño curioso y dulce que quiere jugar con sus amigos y adora a su familia.
Por otro lado tenemos a la misteriosa mujer que aparece un día en la tienda junto con su hija, la cual se hace muy amiga de Taro y empieza a remover tanto el presente como el pasado de Mitsuko.
Gracias a esta misteriosa mujer podemos conocer el pasado de Mitsuko, haciéndonos reflexionar sobre temas como la maternidad, el miedo al pasado y a la verdad o cómo nos relacionamos con nuestro entorno. Son unos temas que he disfrutado ya que desde un principio conocemos a una mujer dura que decide tomar su propio camino en solitario, hasta que un niño se le cruza en su camino, y ahí vemos como la moral y la empatía toma forma en la historia, al igual que el miedo al pasado y a que se desvele la verdad.
La trama no es especialmente compleja, el misterio se huele desde prácticamente las primeras páginas, pero me ha gustado ir desvelando poco a poco las capas que envuelven a Mitsuko y vivir a través de sus historias al pasado todo lo que ha tenido que pasar para llegar a donde está.
El libro es bastante corto, apenas 130 páginas, pero valen la pena, aunque si es verdad que la trama podría haber dado mucho más de sí. Los diálogos son sencillos, cercanos y naturales, la narración también es dulce y ligera, hace que pases las páginas sin apenas darte cuenta hasta llegar al final.
