Título español: Actos Humanos
Título original: 소년이 온다
Saga: No
Libro: Autoconclusivo
Autora: Han Kang
Editorial: Rata_
Año publicación: 2018
ISBN: 9788416738342
Género: novela contemporánea.
Nº de páginas: 272 págs.
Coste: 19.50 €
En mayo de 1980, en la ciudad de Gwangju el ejército sofocó una sublevación popular provocando miles de muertos.
Actos humanos revive esos terribles sucesos a través de las experiencias de siete personajes diferentes: la tortura, el miedo, la angustia de no encontrar a los desaparecidos, el duelo, el sentimiento de culpa del superviviente, las pesadillas, las heridas, las secuelas, los reencuentros... Y el recuerdo de los muertos, su voz y su luz.
Periodista y escritora surcoreana, Han Kang nació en la ciudad de Gwanju el 27 de noviembre de 1970. Pasó gran parte de su infancia en su ciudad natal antes de mudarse con su familia a Seúl. Tras finalizar sus estudios en la escuela, estudió letras en la Universidad Yonsei. Tras su graduación comenzó a escribir para medios como Samtoh o Publishing Journal, además de empezar a publicar sus primeros cuentos y relatos cortos.
Debutó con “El amor de Yeosu”, trabajo publicado en 1995 y continuó con libros importantes para su carrera como La vegetariana, obra compuesta por tres cuentos (“La vegetariana”, “La mancha mongólica” y “Los árboles en llamas”). Este trabajo la llevó a ganar en 2016 el prestigioso premio Man Booker International Prize.
Ya llevaba el tiempo mirando este libro en las librerías, la autora me había cautivado con sus otros libros “La vegetariana” “Blanco”. Tenía entendido que Actos Humanos sería un libro más crudo y doloroso de leer, y no se equivocaban, en este libro descubrimos relatos de diferentes personas que sufrieron ya sea directa o indirectamente la represión ocurrida en la ciudad de Gwanju, de donde es la propia autora, en los años 80, narrado de manera ficticia pero con toques biográficos relevantes.
Gwanju, mayo de 1980, el ejército acometió contra la población que defendía sus ideales sin piedad. En esos días se cometieron crímenes contra la humanidad que marcarán por años a aquellos que tuvieron la “suerte” de sobrevivir, dejando huella no solo en sus cuerpos, sino también en sus mentes.
Una rebelión sofocada a base de balas y torturas, de encarcelamientos, miedo, y opresión que atentó contra la vida de miles de civiles que solo defendían sus derechos y su ideología.
Siempre me ha parecido súper interesante y a la vez chocante conocer los testimonios de aquellos que padecieron y padecen la tortura mental y física de atentados contra los derechos y la dignidad humana. Creo que la gran mayoría sentimos ese morbo por lo macabro, lo malvada que puede llegar a ser la gente y el daño que puede causar en otra persona, tanto físico como mental, en este libro se conocen testimonios, relatos, ciertos o no, de diferentes puntos de vista de personas que padecieron esa opresión por parte de los que deberían protegerlos.
El libro está narrado tanto en primera como en segunda persona, nos hace adentrarnos más en las carnes de los protagonistas en algunos relatos, como verlo todo desde una perspectiva general en otros.
El primer relato es el que te engancha, con la búsqueda de un joven por parte de su amigo que acaba de voluntario registrando los cuerpos de los civiles asesinados por los militares, que llegan día tras día, donde se les limpia y guarda en un patio para que sus conocidos los reconozcan, a partir de ahí conocemos diferentes personajes que están o no, relacionados entre sí, cada uno tiene una historia que contar, ya sea la historia de un alma masacrada, una universitaria que recibe 7 bofetadas que debe superar, o los estudiantes o mujeres torturados/as por razones insuficientes, atrocidades que les hacía renegar de su cuerpo, odiando el dolor que se repetía una y otra vez, sin dormir, ni comer, tratados como basura para demostrar lo absurdo de acabar así por defender sus propios ideales.
La verdad es que enseguida empatizas con la historia, no se muestra nada exageradamente macabro, pero gracias a la sutil y delicada escritura de la autora podemos conocer esos hechos enmascarados relatados de tal forma, que se transmite ese dolor y ese pesar sin llegar a ser demasiado violento.
